lunes, 16 de enero de 2012

pareto y el interés general

El italiano Pareto ha dado nombre a uno de los iconos sagrados del pensamiento único liberal-burgués: el equilibrio paretiano.
Se alcanza un "equilibrio de Pareto" cuando no se puede mejorar la situación de nadie, si no es empeorando la de otro. A más a más, a esta situación se le llama "óptimo de Pareto" o "Pareto-eficiente", en contraste con las situaciones en las que se puede mejorar la situación de alguien sin empeorar la de nadie. Esas situaciones serían ineficientes, porque bastaría lleva a cabo ese cambio para mejorar la "situación general".

En wikipedia hay una cita suya que ayuda a clarificar el concepto, y que se basa en la aspiración de medir el "bienestar de una sociedad":
“El bienestar de algunos se puede mantener constante sin que nuestras conclusiones resulten afectadas. Pero si, por el contrario, el pequeño movimiento (de una forma de estado social a otro) aumenta el bienestar de algunos individuos y disminuye el de otros, no puede afirmarse que el cambio es ventajoso para la colectividad en su conjunto”

En el mismo sitio se ilustra a donde nos lleva esto:
"Por ejemplo, si un individuo posee el 99% de la riqueza y el 99% de la población se reparte de alguna manera el otro 1%, eso es un Óptimo de Pareto, en que no se puede mejorar la situación de ese 99% sin reducir la del individuo que tiene todo. Pero igualmente óptima para Pareto seria la otra situación en la cual cada individuo en una sociedad tenga exactamente lo mismo que cualquier otro. Lo mismo se puede decir de las numerosas posibilidades intermedias. Desde el punto de vista del Óptimo de Pareto, no hay un criterio que permita seleccionar una como preferible a las otras."
Ni que decir tiene que este criterio de "optimalidad" será muy conveniente para un individuo como el del ejemplo que detenta casi toda la riqueza de una sociedad, y en general para cualesquiera élites oligárquicas que disfruten de posiciones privilegiadas: No se puede afirmar, con esta ciencia positiva, tan formal y precisa, que cualquier cambio en la sociedad para beneficiar a la amplia mayoría de la población nos lleve a una posición netamente superior, si ello implica empeorar la situación de los privilegiados.
Por supuesto, nada es inocente, y esto nos lleva a los discursos buenistas e integradores de nuestros socialdemócratas, mucho más preocupados en "hacer crecer la tarta" que en cómo se reparte ésta... Su promesa es que, al final, nos llegarán mayores migajas si crece el pastel.
Y el caso es que hasta esa mezquina y cobarde promesa es mentira.

7 comentarios:

  1. Magnifico blog. Un excelente nivel desde una mirada marxista. Economia socialista necesaria en estes tiempos. Desde una optica socialdemocrata (la mía) una nota sobre la 'tarta' y su reparto que comentas. No en las economias liqht socio-liberales como la nuestra pero si en las socialdemocracias más avanzadas hasta la fecha, como son y han sido la nórdicas, si se ha ampliado el tamaño de la tarta y el tamaño del reparto al mismo tiempo. Demostrando, de manera cientifica,creo, que crecimiento e igualdad se alimentan uno de otro. No se excluyen. Al contrario. Pero a lo mejor, tu no opinas lo mismo. Saludos....

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    1. Gracias por el comentario, Antonio.
      Efectivamente, no opino lo mismo.
      En el capitalismo rigen entre otras dos tendencias: la proletarización y la depauperización. Como tendencias, pueden ser compensadas en periodos concretos, pero no indefinidamente: a la larga, la acumulación se hace con una creciente desigualdad en la distribución.

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  2. Bien, algunas ideas sobre economía socialdemocrata. 1º Como economista social ¿tu que le pides a tu modelo económico?: ¿Crecimiento económico del conjunto social? ¿Que ese crecimiento este repartido (y generado) en la mayor mayoría social posible?. Si es así, tu modelo, hoy, creo que debería ser el socialdemocrata. Supera a cualquier modelo actual en los 2 objetivos. Liderazgo en competivitivad/crecimiento( tamaño de la tarta) e liderazgo en igualdad (el reparto de la tarta). Y no es tan fácil conseguirlo. Y no se ve por ningún lado ni proletarización ni depauperización. Al contrario. La riqueza sube, y sube siempre desde la mayoría. No hay nada indefinido, pero, p.ej, los nordicos ya llevan 60 años demostrándolo. Hay leyes físicas que han durado menos tiempo. 2º En realidad, un modelo socialdemocrata y avanzado (ingresos fiscales y economía pública próxima al 50& del pib total) solo es una mezcla de economía capitalista (mercado, individuo, libertad) y economía comunista (estado/comunidad/igualdad). Socializar al 100% como quiso hacerlo el 'socialismo real' no parece rentable (por pérdida de incentivos, quizás ), socializar hasta un cierto punto óptimo de rentabilidad parece que lo consiguieron los nórdicos y, menos, los centro-europeos. Saludos, ...

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  3. Mi "modelo económico" no existe. De hecho, yo soy un mero criticón, solo un estudiante de economía (licenciado hace muchos años, pero estudio por libre todo lo que puedo), y todo lo que voy aprendiendo me lleva a criticar el capitalismo y a toda la izquierda "reformista" que aspira a un capitalismo bueno.
    Pero si hablamos de alternativa, no tengo una alternativa completa y acabada. En realidad, tampoco la necesito: la alternativa sólo será y sólo deberá ser la que los trabajadores, democráticamente, decidan y construyan.
    Evidentemente, si tengo mis propios ingredientes favoritos para un mundo poscapitalista. En otro lugar ya sostuve que no es la igualdad, sino la justicia a lo que debemos aspirar. Y de paso, repetí allí también que en mi opinión el horizonte estará en liquidar los últimos vestigios de esclavitud: el trabajo asalariado.
    Respecto a la socialdemocracia, insisto: no hay un capitalismo bueno. Puede sonar a ventajista, pero todo lo bueno que pueda tener un sistema económico socialdemócrata o "nórdico" está basado en la sustitución del capitalismo por la democracia, y no por un aprovechamiento, armonización o cooperación con el capitalismo.

    Y por cierto, respecto a la duración de las leyes físicas: El concepto de leyes físicas hace que estas sean eternas, a diferencia de la ley en ciencias sociales. Otra cosa es su adecuada especificación por los limitados seres humanos: la ley de la gravitación universal de Newton es eterna, pero resulta que en la naturaleza no rige esa ley, sino otra más "precisa", la de la relatividad de Einstein; no obstante, cada vez hay más indicios de que tampoco esa "ley" rige en realidad, sino que deberá ser superada por otra.
    En todo caso, la "ley última" (si es que es cierto que existe alguna) rige eternamente, a diferencia de las leyes en ciencias sociales, que rigen siempre... siempre que exista la sociedad para las que se formulan.

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  4. Ok, creo que no debo debatir con alguien tan alejado de mi planteamiento económico. Creía que estabas más cercano. Sólo algunas sugerencias con la más absoluta cordialidad. Un economista sin modelo económico, sin alternativa, mejor o peor, es como un arquitecto sin planos, o un sastre sin patrón de corte. Cualquier trabajador que acuda a uno de esos dos profesionales espera que sea el profesional el que le diseñe la casa o le prepare su traje. Y no espera que deba ser el haga esa función. Otra cosa es que finalmente sea el trabajador el que decide si queda, o no, con la casa y con el traje. Es decir, el economista debe proponer soluciones y modelos, sobre los que el ciudadano, democráticamente, decidir. Y veo que tu, con todo tu derecho, desde luego, estas muy lejos de este planteamiento. Quizás estas 'paseando por los cielos'. Un excelente sitio, por otra parte. Sobre el capital: en mi opinión, el problema no es el capital (una mera y simple vara de medir), el problema real es la excesiva desigualdad de capital. La excesiva desigualdad de capacidades. Que es la que finalmente provoca lo que tu llamas injusticia. Concepto, por cierto, poco materialista y más de tono moral. Poco económico. Injusticia, en todo caso, que se corrige, eso si, solo y exclusivamente con un aumento de la igualdad. No ver que la injusticia (el abuso, la explotación) se corrige con mayor igualdad creo que es error fuerte tuyo. Igualdad de capacidades, en el sentido explicado por Amartya Sen, que seguro conoces. Ese aumento de la igualdad de capacidades lo han conseguido, llevándola al top conocido hasta la fecha, las sociademocracias nórdicas. Socialdemocracias límitrofes, no casualmente, con el socialismo 'cientifico'. Deberías ver sus índices de Gini historicos y compararlos con los del socialismo real. En cuanto al trabajo asalariado, si me ofrece dudas, y es muy posible que el modelo cooperativista (Mondragon) sea una excelente alternativa. En fin, una pequeña critica, sin más importancia. Saludos,

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  5. Antonio, un millón de gracias, porque tus inteligentes comentarios demuestran que no solo has pasado por aquí, sino que has leído lo que he escrito y además que lo has entendido perfectamente. Incluso ¡has pillado el sentido del nombre del blog!

    "Paseando por los cielos" es un lugar donde pongo todas las largadas que se me ocurren y es muy cómodo porque no tengo las molestas trabas de cualquiera que tenga una militancia política que respetar (y aquellos con responsabilidades ya no digamos), un prestigio académico que fomentar, o una simple aplicación profesional del conocimiento, como lo que apuntas con el ejemplo del arquitecto.

    El que pasea por los cielos puede permitirse desde su nube teórica debatir y criticar sin proponer. Además, y esta es la parte payasa del asunto, se corresponde con el alias que en su día elegí para el blog, una chiquillada procedente de mis tiempos de chiquillo.



    Dicho esto, creo que tampoco sería justo ni exacto dejar ahí la cuestión.

    Pasear por los cielos en estos tiempos no es un ejercicio de purismo descomprometido, ni de cinismo sinvergüenza.

    Hoy en día, cuando estamos a un millón de años luz de algo que pueda parecer una conciencia de clase entre los trabajadores, existe un imperialismo triunfante del "pensamiento único" que creo que debe ser nuestro objetivo número uno. Desmontar todas las mentiras, medias verdades y "realidades que nadie discute hoy en día" es la tarea más urgente para cualquiera que se considere demócrata.

    Y eso es lo que pretendo que sea “paseando por los cielos”.



    Por otra parte, la falta de concreción en la alternativa propuesta, cuando se propone algo (en muy contadas ocasiones) permite agrupar en torno a la crítica al mayor número posible de tendencias o, como se dice hoy día, permite sumar en lugar de restar.

    Y por esa misma razón, visto lo que se ve en los medios cavernarios y en la “real politik”, creo que para nada estamos “alejados en nuestros planteamientos económicos”. Si ambos pretendemos un mundo mejor que el que vivimos estamos acorralados por las agencias de calificación, las líneas dirigentes de FMI, UE, Bancos Centrales (europeo o español), las líneas ortodoxas (únicas con visibilidad) en la universidad o las publicaciones prestigiosas sobre economía, incluido el Banco de Suecia que otorga el falso “nobel” de economía, y en los programas de los partidos políticos que son “alternativa real de gobierno”. Aunque sólo fuera por esa razón, estaríamos condenados a entendernos.

    Pero es que, además, creo que nuestros objetivos y estrategias coinciden: en el apogeo del modelo socialdemócrata, la Europa occidental de los 60s-70s se tuvo una gran oportunidad para la sustitución del capitalismo por una democracia social, económica y también política que, desgraciadamente, no se aprovechó. El resto de la historia es bien conocida y nos ha traído a donde estamos.



    En todo caso, aunque no estés de acuerdo tampoco en este punto de vista, creo que debatir siempre es interesante y constructivo. Y cuando se hace con alguien inteligente mucho más.

    De modo que, cuando gustes, serás bienvenido.



    (continua...)

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  6. (...continuación)



    Por último, y respecto al capital y la injusticia, de nuevo tienes toda la razón: la justicia es un término moral que no tiene cabida en el frio análisis del materialismo histórico en el seno del socialismo científico. Así lo sostengo frente a javirl en un interesante debate acerca de la teoría del valor en su blog G-7.000.000.000 “democracia vuelve a sonar a revolución” (siempre recomendable, por cierto).

    Pero es que, como decía el abuelo Marx, está muy bien lo que hacen los científicos de explicar el mundo (y él mismo fue uno de los mayores en esa tarea bajo mi punto de vista) pero lo verdaderamente importante es cambiarlo.

    En la explicación del mundo las valoraciones morales no hacen sino estorbar. Pero la tarea verdadera, caminar hacia un mundo mejor, necesita una caja de herramientas analíticas, científicas, tanto como una guía moral que nos provea de criterios para saber donde queremos ir.

    Precisamente Pareto pretende robarnos esto, al descalificar un cambio (¿una revolución?) que mejorara la vida de casi todos a costa de empeorar la de los antiguos privilegiados, si es que la mejora cuantitativa del 99% no alcanzara para compensar las colosales pérdidas que sufrirían los amos del mundo.



    Salud2

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