Buscando y buscando material (acumulo mucho más de lo que me da tiempo a estudiar) para mi estudio de economía marxista, economía política, socialismo científico o como se le quiera llamar, voy encontrando piezas cada vez más antiguas de autores que ya se encontraban las mismas situaciones que vemos hoy.
Un caso espectacular ha sido ver lo que ponen en el archivo marxista en internet como cita de cabecera de Henryk Grossman:
"¿Qué ocurrió en el año 1929 en los EE.UU. y el año 1931 en Alemania e Inglaterra, si no una crisis gigantesca? La clase obrera no estaba preparada para esto. No tenía un Lenin, que esperaba y trabajaba para llegar a ese momento. Por el contrario, durante décadas se escuchó de Hilferding y Helene Bauer que una crisis era imposible. Sólo esta desorientación de la clase obrera hizo posible que la clase dominante superara el pánico y sobreviviera a la crisis".
Henryk Grossman (1881-1950)
Sólo hace falta cambiar las fechas y los nombres de algunos personajes y ¡tenemos un retrato de la situación actual absolutamente exacto! ¿Hace falta añadir algo?
Quizá sólo que la obra de Grossman se centró en la teoría marxista de la crisis, que los revisionistas de todo pelo (infraconsumistas y sobreconsumistas) "corrigieron" (malinterpretaron, falsificaron y negaron: ver Peter Howell, De nuevo sobre el trabajo productivo e improductivo y el propio Grossman Law of the Accumulation and Breakdown, en inglés), mientras que durante todo el siglo XX y hasta hoy ha habido "correctores" en todas las áreas de la economía marxista, empezando por la ley del valor trabajo y terminando por la ley de la tendencia decreciente de la tasa de ganancia. Como cumbre de estas falsificaciones, Ian Steedman o David Laibman (ver por ejemplo en David Yaffe, Valor y Precio en El Capital de Marx, o también la obra citada de Howell).
Como enfatiza el propio Howell (obra citada), no es que a los marxistas nos de miedo revisar críticamente la obra de Marx, es que sabemos positivamente que cada tergiversación y falsificación de la misma lleva inmediatamente a un triunfo del programa político reformista y, por su mediación, al desconcierto, desunión y derrota de la clase obrera.
La teoría del eterno retorno, deprimente como es, aplicada a la deprimente incapacidad de la clase trabajadora para emanciparse.
...Al menos hasta la fecha.
"Tiemblen, si quieren, las clases gobernantes, ante la perspectiva de una revolución comunista. Los proletarios, con ella, no tienen nada que perder, como no sea sus cadenas. Tienen, en cambio, un mundo entero que ganar."
ResponderEliminarLos “proletarios” solo temblamos si desciende nuestro equipo…también decía Marx que los obreros tiene mas hambre de respeto que de pan, a veces parece que no tenemos respeto ni por nosotros mismos.