sábado, 2 de junio de 2012

lecciones desde grecia

Quizá por estar contra las cuerdas, en Grecia está ahora mismo la única lucecita de esperanza que puedo vislumbrar frente a la absoluta derrota de los trabajadores en todos sus frentes, en todas sus estrategias y en todos los plazos previsibles (José Luis Sampedro tiene absoluta razón cuando dice que "otro mundo es seguro", pero precisamente porque no dice qué otro mundo, ni cuando).

Y ¿en que consiste, bajo mi punto de vista, esa lucecita, esa esperanza? Pues para explicarlo un poquito primero tengo que contar en que creo que consiste la penumbra, la desesperanza, a la que sirve de contraste. Mi desesperanza en las perspectivas, no ya de victoria del pueblo frente a sus amos y verdugos, sino incluso de una mínima resistencia en unas posiciones de mínimos.


En diversos lugares se está multiplicando la pregunta absolutamente pertinente: "¿qué hacer?". Por todas partes la leo y la escucho. Esto creo que son buenas y malas noticias:
Las buenas son que eso significa que hay quien está en marcha, y es plenamente consciente de que el momento es ahora (por otra parte, el momento siempre es ahora, pero esa es otra cuestión). Al menos tenemos claro que "algo hay que hacer".
Las malas son que estamos absolutamente desorientados sobre la dirección a tomar, hacia donde empujar y de donde agarrar. Como dice el Mendigo, como "no se ha sembrado", ahora no tenemos cosecha que recoger, pero luego volveremos sobre esto de la siembra.

Yo estoy acostumbrado a sospechar de los programas de mínimos, las medidas de transición, las "reformas", el "colaboracionismo". Los marxistas sabemos (o creemos saber) que no existe un capitalismo bueno, y que ni existe un interés común de capitalistas y trabajadores (ninguno!) ni es posible mejorar la posición de la clase trabajadora sin conseguir que deje de ser la clase trabajadora. Por eso, sólo apoyamos las luchas obreras para la mejora de sus condiciones de vida y trabajo dentro del capitalismo en la medida en que formen parte de una estrategia de más largo plazo para superar el capitalismo. Pues bien, discutiendo en un nuevo post del blog del Mendigo (que ha conseguido que vuelva a escribir en este blog), sobre "¿qué hacer?", he caido en la cuenta de que el fundamental problema ahora mismo para la lucha de la clase trabajadora es que no existe tal lucha; ni siquiera parece existir la propia clase trabajadora; incluso nos costaría nombrar a alguien conocido que se definiera a sí mismo como "un obrero" o "un trabajador". Somos todos "ciudadanos", "consumidores", "votantes" o, como mucho "capital humano con patas".
Siendo así, podemos darle vueltas y revueltas, buscar acuerdos o formar núcleos cohesionados, discutir interminablemente sobre aspectos teóricos o lanzarnos a la arena con lo puesto, cruzando los dedos para no meter la pata. Pero cualquier propuesta, consista en una reforma fiscal, en la abdicación de los borbones o en la expropiación de todo el capital, la que sea, caerá en saco roto.
El verdadero problema, o al menos el primer problema táctico con el que nos encontramos sea cual sea el camino que queramos tomar, es que sistemáticamente encontraremos más gente enfrente que detrás o a nuestro lado. Las víctimas del expolio que estamos sufriendo besan la mano que les recorta y escupen en la cara de cualquiera que pretenda una alternativa.

Y siendo así, no ya lo más urgente, sino lo único que podemos pretender, es cambiar la dinámica de las cosas que hace que eso sea así: que el marco institucional (en sentido amplio, puesto que la industria mediática tiene una enorme importancia en este asunto) sea sustituido por otro profundamente democrático.
En plata: al final les voy a dar la razón a los perroflautas y voy a pedir consigna única: DEMOCRACIA REAL YA.
Esta consigna tiene grandes ventajas:
-es simple, breve, lineal
-utiliza términos incluidos en el lenguaje de lo políticamente correcto
Todo ello hace que pueda hacerse llegar a toda esa población que hace propios los mensajes del poder, del pensamiento único, ya sea por adhesión convencida (los menos), ya por miedo, puro pánico, a cualquier alternativa por “aventurera”, “trasnochada”, “utópica”, etc. (los más).

Propongo eliminar del primer plano nuestros programas inmediatos, nuestras medidas a medio plazo y nuestros planes a largo plazo, y centrar toda nuestra estrategia en las siguientes medidas concretas:
1) poner por delante y en cada convocatoria, sea por y para lo que sea, de huelga, manifestación, encierro, asamblea… siempre, como portada la consigna única “DEMOCRACIA REAL YA”.
2) poner siempre, como reivindicación número uno, única innegociable, un programa de mínimos para democratizar el pais (preferiblemente a nivel de la UE, pero incluyendo todos y cada uno de los niveles institucionales):
-circunscripción única y sistema proporcional
-separación de poderes
-posibilidades reales de control y deposición del gobierno, desde otras instituciones y a iniciativa popular
-multiplicación de las consultas por referendum, vinculantes.
-eliminación de cláusulas de exclusión de la voluntad popular (del tipo: “pagar los intereses será prioritario”, “no se puede incurrir en déficits públicos” o similares)
3) …y por supuesto, en elecciones no votar, nunca, BAJO NINGUNA CIRCUNSTANCIA, a PPSOE o nacionalistas comprometidos con su tinglado (CIU, PNV, CC y UPN)

Por un lado, la democratización, no nos engañemos, en un paso previo IMPRESCINDIBLE para que sea posible siquiera intentar cualquier otra propuesta, más o menos ambiciosa, más o menos inteligente. Si seguimos en el tinglado que tenemos, hablar de propuestas distintas a las del poder es perder el tiempo. Insisto: nuestro propio "público objetivo" es la primera línea de defensa del enemigo. Esto se comprueba en cualquier bar, parada de autobús o supermercado: lo más escuchado son cosas como "el recorte es imprescindible", "hemos vivido por encima de nuestras posibilidades" o similares.
Por otro lado, su mayor virtud está en que quizá este programa resulte, en apariencia, inocuo -porque utiliza términos usados en el lenguaje de los poderosos- y gracias a ello podría incluso saltarse la barrera de miedo que se ha construido alrededor de la mayoría de la gente. Si este mensaje se puede asumir por la mayoría de la población, puede ser el mejor camino para ir construyendo verdaderas mayorías FRENTE al sistema.

Por supuesto que ahora mismo tenemos tantos ataques y tan graves que hablar de estas cosas parecen juegos florales mientras nos están dando bien por culo, pero es que como no hemos “sembrado” (como bien dice Mendigo esto es en gran parte responsabilidad de IU y de nadie más) en su momento, ahora no hay manera de levantar defensas contra esos ataques.
Al final, ¿qué es todo eso sino el programa de Syriza, lo que está siendo el banderín de enganche para una verdadera revuelta de LAS MASAS? ¿No?
En fin, hoy mismo he visto en este artículo que Syriza tiene muy claro cual es la estrategia a utilizar para ganar las elecciones venciendo al miedo que quieren infundir entre los griegos (evidentemente, cada vez más curados de espantos), y que por otra parte no impiden mantener que la prioridad y lo importante es NEGARSE A LOS RECORTES, y no "salirse del euro".

[promemoria: magnífico libro libre en Sin Permiso, un monográfico sobre Grecia a base de artículos de muchos autores, incluido uno de Syriza con su programa para las elecciones del domingo y una interesante "cronología". Obligatorio.

otro: una referencia a más o menos lo mismo, también en los USA]

17 comentarios:

  1. Si te he hecho retomar tu actividad en la red, ya sólo por eso merecen la pena mis comentarios.

    Bueno, en este tema lamentablemente no vamos a poder debatir gran cosa, porque estamos visiblemente de acuerdo.

    Sólo decir que lo de sembrar no es cosa mía, es algo que leí no hace mucho, de un médico opositor a Ben Alí, Moncef Marzouki.

    Échale un ojo: Lluvia sobre el desierto.

    Los dos conceptos los tenía ya en la mente, la escala temporal de los cambios sociales y la necesidad de preparar estos cambios. Pero leer el párrafo de este hombre me dejó atravesado, por la belleza y sencillez con que estaba expresado.

    Una revolución es en la historia como un fogonazo, un destello que dura un suspiro y parece venir de la nada, pues antes sólo había oscuridad. Pero esta apreciación es falsa. Para que puedan desencadenarse las fuerzas tectónicas de un terremoto, han debido pasar siglos de incremento de presión en los bordes de las placas, preparando silenciosamente el momento del estallido. Cuando llega el terremoto, son sólo unos segundos, pero se está liberando la energía acumulada durante años y años.

    Importante ver a un Durruti al frente de una columna de milicianos, pero para que tal cosa se produjera, hubo un trabajo previo de décadas, de oscura labor sin recompensa de imprentas ilegales, de octavillas a la entrada de las fábricas, de mítines clandestinos, de huelgas y solidaridad obrera.

    Quizá nosotros no lo veamos, pero me iré a la tumba en paz si creo que he empujado en el camino de un mundo más justo. Otros lo disfrutarán (así como yo disfruto el fruto del sacrificio de muchos).

    Hay que sembrar. Cuestionar las bases del sistema. Sembrar la duda en la sociedad, y dejar que crezca y se desarrolle. ¿Es justo que el patrón viva de mi trabajo?

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  2. No has podido estar más acertado en que la gente sabe que “algo hay que hacer” pero está desorientada y no sabe en qué dirección hay que hacerlo. La Democracia por supuesto es la única vía posible, y por supuesto, LA REAL, no la pantomima a precio de oro que nos venden cada 4 años… a precio de oro, trabajo, ahorros, pensiones, educación, deuda pública… nos lo quitan todo para financiar el rescate a un 1% de la población mediante una farsa electoral, de cuya victoria “sólo” podemos (en esta última tanda) culpar a unos 18 millones de personas. Creo que es un número extremadamente alto. Habría que empezar por ahí. La gente vota al PPSOE porque creen que la única posibilidad es que salga o “uno o uno”, pero no se dan cuenta de que realmente esa posibilidad depende (de momento quiero confiar en la veracidad de las votaciones y su recuento porque si no, apaga y vámonos) de todos y cada uno de los españoles censados y en edad de votar. Si esos 18 millones se hubiesen planteado que “otra realidad es posible” (que la es) otro gallo cantaría.
    Puestos a sembrar (muy acertado también el término), y ya que la consecución de que 18 millones de personas (más los 10 millones de abstenidos (se dice así?)) cambien de elección electoral, vamos a tener que sembrar mucho y tal vez durante bastante tiempo, pero puede que haya vías de actuación. La primera es desdispersarnos, pues se crean cada día grupos, organizaciones, nuevos partidos, etc etc del resto de ciudadanos, que sabemos que el PPSOE no es para nada la solución. Tenemos que arrejuntarnos un poco, y empujar todos en la misma dirección…. El cómo aún no lo sé, estoy en ello, pero de momento se me ocurre un elemento aglutinante: La Democracia Líquida.
    En la búsqueda de la Democracia Real, me encontré hace poco con la Democracia Líquida, y no he querido dejar pasar la oportunidad para comentarla aquí. Resumiendo: es un sistema de votaciones permanente y a tiempo real (no cada 4 años) como si de un constante referéndum se tratase, vía internet, y en la que cada persona decide su nivel de implicación en cada momento, esto es; puede votar directamente cada decisión que se tome en el Parlamento, o bien puede delegar su voto en un representante (organización, partido político, o persona que se haya ofrecido como representante) con la ventaja que puede cambiar de representante o retirar su delegación para votar ella misma, en cualquier momento. Por supuesto, en cualquier momento, la persona puede volver a delegar. Dejo un link, por si os interesa, y gracias por el blog ;)
    http://www.democracialiquida.org/

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    1. Me parece genial que la consigna de DEMOCRACIA REAL YA pueda aglutinar tantos apoyos. La idea es precisamente esa, servir de banderín de enganche.
      Además veo que mucha gente se lo está currando en interesantísimas propuestas de cómo democratizar el tinglado.
      Pero mi propuesta de plantear DEMOCRACIA REAL YA como consigna prioritaria de cabecera parte de dos premisas:

      (1) Sin un cambio en el entramado institucional, sin un mayor (no "verdadero" pero mayor que el actual) poder popular, será imposible que consigamos nada.

      (2) El camino que llevamos es de un empeoramiento en la correlación de fuerzas. Necesitamos un revulsivo para revertir esta dinámica de triunfo ideológico del capital, basada en actualizaciones del eterno discurso del miedo y las promesas (palo y zanahoria), respaldado por un fabuloso despliegue de medios.

      Esa es la idea, empezar a sumar y dejar de restar. SIMPLIFICAR LA SITUACIÓN. Abandonar el camino desastroso que llevamos para empezar otro, y para ello descender hasta la mismísima roca madre basal, hasta un reduccionismo tal que podamos ya hablar con propiedad de "buenos y malos", y podamos comprobar que somos infinitamente más los buenos y que no deberíamos tener nada que temer.
      Y a partir de ahí, construir.
      Por eso, LA IDEA DEBE PERMANECER PURA Y SENCILLA, en una virginal abstracción: DEMOCRACIA REAL YA. Mínima representación, máxima participación, mínima independencia de las instituciones, máximo control popular, ...
      No me adhiero, por eso, a debates sobre el contenido concreto del programa para obtener una DEMOCRACIA REAL YA. Porque no se trata de construir ya el sistema democrático definitivo, sino de empezar a andar el camino de la democratización. Y de sumar apoyos.
      Sinceramente, ideas "revolucionarias" sobre novedosas "tecnologías de la democratización" pueden asustar más que atraer a las masas y, sólo por eso, deberían desecharse al menos provisionalmente.
      Si, por el contrario, con una circunspripción única, sistema proporcional, listas abiertas o cualquier otra SIMPLE modificación normativa podemos reforzar INMEDIATAMENTE el contenido democrático de la votación de papeleta de toda la vida podremos mejorar más fácilmente la correlación de fuerzas Y EN ESO CONSISTE ÚNICAMENTE MI PROPUESTA.
      Cualquier divergencia desde esa perspectiva nos mete en nuevos debates que van en la dirección contraria, la que se trata de evitar, la de seguir discutiendo si son galgos o podencos.

      Y todo ello porque, verdaderamente, creo que empezamos a meternos en una dinámica muy peligrosa.
      El "cuanto peor, mejor" siempre me ha parecido un error, y la experiencia griega, que en muchos sentidos contiene algunas gotas de esperanza, en conjunto demuestra, en mi opinión, que el empeoramiento de las condiciones de vida de los trabajadores y su alejamiento, formal y sustantivo, del poder les acerca (NOS acerca) al fascismo más que a ninguna otra cosa, sea por el aumento del apoyo popular al "nuevo amanecer", sea por un asalto de los coroneles al parlamento (ya asaltado por los tecnócratas por otro lado).

      Gracias por el aporte y abrazos a todos los "buenos"

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    2. Buenas, Martuka.

      Estaba leyendo tu descripción de la "democracia líquida" mientras pensaba "esto es la definición de democracia directa". Hasta que, al final, introduces la representación.

      Pero ¿por qué? ¿para qué? Ya que estás proponiendo un sistema democrático, ¿por qué introducir la rémora del sistema actual, lo que impide que la ciudadanía asuma el gobierno? No veo, simplemente, la necesidad.

      Veamos, cada ciudadano puede emitir un voto. Si el ciudadano tiene dudas sobre el sentido de su voto en una votación en concreto, o simplemente quiere informarse, podría acudir a las páginas de los partidos, donde le explicarían cuál es el sentido del voto sugerido, espera, que lo remarco, SUGERIDO por ellos. Es de suponer que no sólo dirían si, no o abstención, sino que además lo argumentarían de forma más o menos desarrollada. De esta forma, no haría falta delegación ninguna: si tienes una posición clara, votas. Si no, consultas las razones de los distintos partidos y eliges la del partido que más te convenza.

      Y este debe ser el fin de los partidos en un sistema democrático: corrientes de opinión que traten de convencer a los electores en el sentido de sus distintas ideologías. Pero no tomar decisiones por ellos. No votar a un partido legitimando todas sus decisiones en 4 años. No comprar el pack completo.

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    3. Escai, el movimiento no sólo se debe centrar en una modificación de la ley electoral. Como bien sabes, las circunscripciones electorales pertenecen al "núcleo duro" de la constitución, y para modificarla necesita de una mayoría absoluta reforzada, más disolución de Cortes, referendum y nueva aprobación por las nuevas cortes.

      Quiero decir, que poner la circunscripción única no es ni mucho menos un cambio menor, es un objetivo extremadamente ambicioso (así nos lo han puesto, todo atado y bien atado), habida cuenta que es una modificación que va en contra de los partidos mayoritarios que, por definición...son mayoritarios, son los que tienen que aprobar esa modificación. Ambos.

      Así que, de forma concomitante, podemos además pedir otras formas de participación democracia directa de la ciudadanía, como la que propone Martuka. La participación puede ser un proceso gradual, empezando a someter a votación las grandes leyes del Estado (empezando por los PGE).

      Por cierto, otro tema que se me olvidó comentarle a Martuka: En el caso de una democracia directa ¿Quién redacta las leyes que son presentadas a votación? He aquí otro punto de análisis.

      Un abrazote a ambos!

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  3. Escai, el movimiento no sólo se debe centrar en una modificación de la ley electoral. Como bien sabes, las circunscripciones electorales pertenecen al "núcleo duro" de la constitución, y para modificarla necesita de una mayoría absoluta reforzada, más disolución de Cortes, referendum y nueva aprobación por las nuevas cortes.

    Quiero decir, que poner la circunscripción única no es ni mucho menos un cambio menor, es un objetivo extremadamente ambicioso (así nos lo han puesto, todo atado y bien atado), habida cuenta que es una modificación que va en contra de los partidos mayoritarios que, por definición...son mayoritarios, son los que tienen que aprobar esa modificación. Ambos.

    Así que, de forma concomitante, podemos además pedir otras formas de participación democracia directa de la ciudadanía, como la que propone Martuka. La participación puede ser un proceso gradual, empezando a someter a votación las grandes leyes del Estado (empezando por los PGE).

    Por cierto, otro tema que se me olvidó comentarle a Martuka: En el caso de una democracia directa ¿Quién redacta las leyes que son presentadas a votación? He aquí otro punto de análisis.

    Un abrazote a ambos!

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  4. Gracias por los comentarios a los dos :)

    Escai: Por supuesto que lo último que hay que hacer es crear más divergencia de opinión de la que "parece" que hay (la inmensa mayoría queremos un trabajo digno, una casa y la posibilidad de darnos de vez en cuando un caprichito con los nuestros, y ya está). La democracia líquida no pretende separarnos más, realmente es una especie de "sinónimo" de democracia real. El problema es que el slogan "Democracia real ya" a mucha gente se le antoja que ha tomado claramente un posicionamiento ideológico que la acerca a determinados partidos.
    Por supuesto que lo que se quiere es que sea verdaderamente REAL y cuanto antes posible. (Pero que conste que a mí el nombre que se le ponga mientras sea real, me daría lo mismo)

    Mendiño: Por supuesto, lo ideal sería que cada cual votase siempre directamente (y se informase para elegir lo más acertado), pero símplemente y por desgracia, la gente no se implica tanto. Muchos por falta de tiempo, y otros por falta de interés. Por otro lado, nos encontramos con que en el parlamento, por lo visto hay una votación cada hora. Yo por mi parte no puedo estar tan a menudo "decidiendo" que votar.

    El voto delegado de la Democracia líquida se puede recuperar en cualquier momento, con lo que si hay un tema por el que se considere que "perder el tiempo" merece la pena, póngase "rescatar o no a los bancos", se puede votar directamente, y delegar de nuevo tras esa votación.

    Además se incluye la posibilidad de que la delegación no es en un partido si o si (como ahora) sino que se puede delegar en quien te de la gana si se ha ofrecido para ello; una ONG, mi abuelo, el cura del pueblo...

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    1. Martuka, pero es que el proceso de apertura democrática debe ser gradual. No puedes pedir que la gente, de la noche a la mañana, pase de ser poco menos que animales de establo, a gobernar un Estado de 50 millones de almas.

      Sería injusto pedir eso, como pedirle a un niño que aprenda a andar en bici con una moto de competición. Lo bajas del triciclo y lo subes en una superbike. Y claro, se piña y recibe la bronca ¿ves, como no sabes montar en bici?

      Podemos empezar por votar sólo las leyes y decisiones de gobierno más importantes (por ejemplo, el rescate de hoy, que nos carga 100G€ de deuda).

      Luego, cada semana se pueden proponer una serie de votaciones, y la ciudadanía podrían votar en toda esa semana. Cada votación tendría enlaces a las posturas de los siguientes partidos, con su recomendación de voto. El caso extremo de ciudadano zombie: no tiene ni idea ni quiere esforzarse en informarse, y aún así quieres votar: mira la página de su partido de turno y sigue a ciegas lo que le diga. Siempre será preferible eso a no entregar tu representación a alguien (ha sido mencionar al cura y ponérseme los pelos como escarpias).

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    2. Por cierto, planteo el mismo proceso en la toma de control de las empresas por los trabajadores. De forma gradual, que vayan haciéndose con la propiedad de la empresa, con participaciones como complemento salarial.

      Primero entrarán en el consejo de administración, para ir aprendiendo. Pasados unos años, quizá varias décadas, no hay prisa, tendrán la mayoría accionarial y será la asamblea de trabajadores la que dirija la empresa. Y ya sabrán pilotar la moto.

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    3. Respecto a la toma de empresas por los trabajadores: material de estudio aquí

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    4. Ah! Coño, conoces a Luis?

      Es otra de las futuras promesas, como Albertito, que ya no lo son tanto. Es muy bueno, ahora que ha acabado la tesis a ver si saca tiempo para escribir.

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    5. si, hace un par de semanas fui a dos clases suyas sobre procesos de integración económica. Me pareció muy bueno
      Y parece tiempo va a tener, porque por lo visto es una de las víctimas de los recortes en investigación y enseñanza superior

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  5. Mendiño y Martuka:
    Lo que tengo en mente precisamente es que los partidos mayoritarios dejen de serlo... o acepten lo que les exigen las MASAS: democracia real ya, y si hay que cambiar la constitución que se cambie. Esta es la idea y no otra.
    En todo caso, que a nadie le quepa duda que los partidos mayoritarios se van a oponer igual de fuerte a esa "democracia líquida" o a cualquier otra cosa que sea democracia real que a unas listas abiertas, a un sistema proporcional, etc.etc. [NOTA: cuando digo "democracia real" no quiero decir absoluta, quiero decir mejor que la que hay; primero porque probablemente no existe como no existe nada perfecto; segundo porque corre mucha prisa, y no estamos para maximalismos].
    Y, además, no veo que esa "democracia líquida" exigiera menos reformas legales que una circunscripción única o un control popular del gobierno (incluyendo su destitución). Probablemente exigiría muchas más reformas normativas, pero además exigiría infraestructuras y medios técnicos.

    Insisto, no estoy en contra sino a favor, pero creo que no es ese el tema.

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  6. Es decir, que cualquier futuro pasa por llegar a la mayoría. Que cualquier partido que se oponga a la Democracia sufra castigo de sus electores. Hacer al PP$O€ jugar en un terreno que no les es favorable.

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  7. Mendiño, en cuanto a lo de las empresas eso sería genial, pero las que hay no lo van a cambiar (por lo mismo que a los Partidos que ya hay todo lo que les huela a democracia les olerá a fosfatina), pero tenemos las cooperativas (no el leído el link de escaiguoloquer, pero imagino que hablará de eso, ahora lo leo), que espero se impongan como modelo a seguir por el 90% y les demos bien en las narices al 10%.

    Y perdón por ser pesada pero creo que no me he explicado, no se pretende que la Democracia líquida la "adopten" los partidos de siempre. Ya hay un partido que la está promoviendo (formo parte, se nota) y la idea es salir elegidos en un futuro como parte del Congreso (grupo minoritario pero que iría, espero, ganando interés en la población). La idea es empezar formando parte del Congreso actual (con los problemas que ya tiene) y acabar siendo la herramienta (eliminar diputados etc) que haga funcionar las elecciones (todas). Es un camino lento, pero confiamos en verlo en movimiento algún día. Por supuesto yo a título personal estoy en ello porque me parece la mejor idea de democracia de la que he oido hablar. Acepto (y apoyaré) cualquier propuesta que mejore a lo que hoy tenemos que no es democracia ni es nada. Paripé cuatrienal.

    Por cierto, gracias por el Blog. He leído más posts y es muy interesante :)

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    1. Gracias a tí. Esperemos ir sumando entre todos hacía la buena dirección.

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